La espera desde que terminó el show de Mastodon no fue muy larga. El majestuoso riff de "Gone Sovereign" daba inicio a lo que se esperaba un gran show de los de Iowa; cosa que no decepcionaron.
La gente coreaba los nuevos temas como si fueran archi conocidos que me resultó sorprendente. La verdad es que no esperaba que mucha gente fuera a ver a Stone Sour, menos si tocaban a la misma hora que Cavalera Conspiracy. La audiencia demostró que Stone Sour tiene un poder especial que los hizo saltar una y otra vez, cosa que sorprendió a Corey y lo hizo tirar botellas de agua mineral a cada rato a un público totalmente prendido y sobre todo con el calor que hacía.
"Absolute Zero" y "Hell & Consequences" eran las que seguían, y como si fuera poco, siguieron con un tema que no esperaba que llegaran a tocar, "Orchids" a mi gusto fue la más prendida de todas. Mandé todo a la mierda cuando empezaron a tocarla, así de simple.
Continuaron con "Made of Scars" y a esta altura el polvo no dejaba respirar a nadie, pero eso poco importaba si Stone Sour estaba al frente. "A Rumor of Skin" era uno de los siguientes temas a presentar de su nuevo disco "House of Gold & Bones Pt. 1". Un tema con un coro muy ondero y fácil de digerir, un temazo. "Reborn", "Monolith", "Blotter" y "RU486" seguían demoliendo al público y la verdad es que el sol y el polvo se transformaron en un factor importante, el único punto bajo de este festival y sobre todo la falta de basureros, no vi ninguno.En fin, "Say you'll Haunt me" y "Digital (Did you Tell)", ambas del "Audio Secrecy" apaciguaron un poco el fervor de la gente que a estas alturas el show era impecable.
Luego de dar paso al encore, Corey aparece con una Gibson dando señal de que comenzaría "Bother", pero antes de aquello dio un breve repaso a "Nutshell" de Alice in Chains (cosa que lo lleva haciendo durante toda la gira) donde la gente la coreó de memoria al igual que "Through the Glass", para dar el momento emotivo de este show.
Para finalizar de forma avasalladora, mucha gente pedía "Get Inside", pero optaron por terminar con "30/30-150" tema que no tiene nada que envidiarle al mencionado anteriormente.
Así terminaba un show más de Stone Sour, donde cada uno de sus integrantes dio el todo arriba del escenario, exceptuando por su nuevo bajista, que a cada rato lo veía sentado, cosa que me extrañó. Sin embargo, Corey Taylor demostró ser un frontman de calidad, de tomo y lomo, sorprendiendo al público tanto como el se sorprendió con el respetable, llegando a agradecernos a punta de lágrimas.
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