Durante casi 30 años, y con las dificultades iniciales en aquellos tiempos en que, para el resto del mundo, nuestro país era algo semejante al Viejo Oeste graficado en las películas de Sergio Leone ("El Bueno, el Malo Y el Feo"), el Metal, en sus variadas ramas, ha tenido que mantenerse firme. Antes del salto tecnológico, la difusión masiva y la profesionalización del medio, para componer y tocar Metal en un país que tardó años en reponerse tanto del impacto de bandas ya consagradas como Iron Maiden, Scorpions y Van Halen, así como del estallido de una corriente extrema en el Hemisferio Norte, con referentes como Metallica, Slayer y Kreator portando el estandarte de un sonido equivalente a una revolución. Una que, incluso, fue más allá de lo musical.
Han pasado 30 años y la escena nacional, a base de pura constancia, dedicación y el apoyo de quienes realmente creyeron en lo que podía surgir en estas tierras, goza de un presente que tiene poco que envidiar a aquellas potencias que sirvieron de inspiración. Si bien hay cosas por mejorar, el nivel de profesionalismo alcanzado en los últimos años llega a ser asombroso, incluso alcanzando prestigio a nivel internacional. Pero, ¿cómo resumir nuestra historia? ¿De qué manera podemos graficar esta evolución cuando las palabras sobran y lo que importa es la música? Es por eso que hemos seleccionado 10 álbumes nacionales (algunos ya pueden considerarse "clásicos obligados") que grafican aquella lucha constante a pura sangre, sudor y lágrimas. Una selección en orden cronológico que define la evolución y auge del género en su esencia.
1.- Necrosis - "The Search" (1988, Heavy Metal Maniac).Al igual que Metallica a nivel mundial, Necrosis fue la primera banda Thrash nacional que editó un álbum larga-duración. "The Search", a pesar de la pobre producción, marcó un hito en la naciente escena nacional. Ocho cortes (dos de ellos instrumentales) en el que el quinteto demostraba cualidades técnicas influidas notoriamente por los propios Metallica y Overkill, y sus temáticas están claramente inspiradas en la conquista de América y el masivo derramamiento de sangre indígena por parte de los colonizadores españoles. A destacar cortes como 'The Search', 'Kingdom Of Hate' y la más extensa 'Prayer', una muestra de técnica y progresión sobresalientes. Un debut que, hasta hoy, sigue haciendo escuela en el género. Nuestro propio "Kill 'Em All".
2.- Sadism - "Tribulated Bells" (1992, Toxic). Junto a Torturer y Atomic Aggressor, Sadism lideró la oleada inicial del Death Metal a nivel nacional, a principios de los '90. Desde aquellas tocatas en la legendaria Sala Lautaro, y luego de editar los emblemáticos demos "Perdition Of Souls" y "From The Perpetual Dark", sale a la luz un LP debut que, por razones comerciales, recién se puso a la venta al año siguiente. Directo, descarnado. Un sonido envolvente, acorde con una complejidad que dan cuenta de una banda que se volvería un nombre de referencia para los amantes del Death Metal de viejo cuño. Cortes como el instrumental 'Tribulated Bells', 'Burning Inside' y 'Transcanalized' dan cuenta de una calidad musical de excelencia. En especial la voz de Ricardo Roberts y el trabajo de Pablo Pino y Raúl Salinas en las 6 cuerdas, elementos decisivos al momento de generar atmósferas en las que el infierno cobra aspecto terrenal. Imprescindible dentro del catalogo nacional más "extremo".
3.- Dorso - "El Espanto Surge de la Tumba" (1993, Inferno). Luego del impacto generado por el debut "Bajo La Luna Cámbrica" (1989) y la incursión en el Progresivo con el conceptual "Romance" (1991), Dorso hace historia con un tercer LP que le daría una identidad propia a la agrupación liderada por Rodrigo 'Pera' Cuadra. Una identidad que, por cierto, traspasaría las fronteras de géneros, incluso llegando a quienes, hasta entonces, se mantenían al margen de lo que ocurría durante esos años en el underground local. Metal Extremo con toques de Jazz y letras que reflejaban una clara inspiración en historias y películas de terror-gore, combinada con una dosis precisa de humor negro basada en nuestra idiosincrasia. Ejemplos de todo aquello pueden encontrarse en 'Deadly Pajarraco', 'El Espanto Surge de la Tumba', 'La Mansión del Dr. Mortis' y la enajenada 'Terror Carnaza'. Locura, vanguardia y mística, elementos fielmentedefinidos en "El Espanto Surge de la Tumba", trabajo que, a estas alturas, ya es un referente de la música nacional, más allá del Metal. Imposible escribir la historia del género a nivel local sin Dorso.
4.- Criminal - "Dead Soul" (1997, BMG/Metal Blade). Hasta mediados de los '90, el Metal a nivel local ya tiene una escena conformada, pero que no logra todavía traspasar las fronteras internacionales. Es ahí cuando Criminal, el combo liderado por un ya experimentado Anton Reisenegger, se despacha una placa que, por primera vez, le da un nombre al Metal chileno a nivel internacional. Con una producción a cargo de Vincent Wojno (el mismo ingeniero responsable de "Burn My Eyes", el debut en grande de unos primigenios Machine Head), "Dead Soul" consiste en una colección de 12 demoledores cortes atrevidos y vibrantes, con los que el cuarteto dejó claras sus intenciones de ganarse un lugar importante en la escena mundial sin tranzar sus principios. De este preciado documento destacan 'Collide' (cuyo vídeo fue nominado a los premios regionales de MTV en la categoría Mejor Vídeo de Rock), 'Slave Master', 'Nation Of Hate' y la emblemática 'Hijos de la Miseria', el corte que barre con la brecha existente entre el Metal Extremo y el idioma español. Un dato importante: durante esos años, mientras las grandes luminarias como Kreator, Slayer y Testament editaban trabajos bastante carentes de la calidad de antaño, Criminal simbolizaba el aire fresco que necesitaba una escena condenada al estancamiento. El Metal chileno se vuelve producto de exportación.
5.- Poema Arcanvs - "Arcane XIII" (1999, Picoroco). Las atmósferas oscuras y siniestras del Doom Metal tuvieron a Poema Arcanvs como su principal embajador en estos rumbos. Aquel sonido siniestro, pesado y melancólico, popularizado a nivel mundial por nombres como Paradise Lost, Amorphis y My Dying Bride, aterrizaba por estos rumbos para hacer escuela. El misticismo del Death-Doom genera una atmósfera romántica, depresiva y natural que, en poco más de 1 hora, transporta al oyente hacia los paisajes más desolados de nuestra existencia. Destaca el corte 'Desde el Umbral', cuya instrumentalidad y letras en español (notable la referencia a la obra de Pablo Neruda) ejemplifican perfectamente el nivel técnico y creativo en el que se encontraba el quinteto al momento de debutar en grande. Luego vendría el más experimental "Iconoclast" (2002), pero el impacto generado por "Arcane XIII" fue decisivo para definir el futuro de una banda que, incluso tendría una recepción positiva más allá del estilo. Por lo mismo, hace rato que esta placa se ganó el rótulo de "indispensable".
6.-Dogma - "$uper Fix" (2000, Fire Works). Si Criminal, unos años antes, se atrevió a romper las fronteras territoriales para demostrarle al mundo lo que acontecía en la escena local, lo que hizo Dogma significó un riesgo en cuanto a la relación masividad/calidad. Luego del auspicioso debut "Improve The Silence" (1997), la banda liderada por el talentoso guitarrista Lucas Yaksic decide dar el paso adelante al barrer con las fronteras musicales, pero manteniendo la firmeza del Metal clásico y directo, destacando la influencia, por igual, de nombres como Testament y Corrosion Of Conformity. Refrescante, diverso, un sonido poderoso y una sensación de agresividad bien canalizada sin perder su espontaneidad. Características que hicieron de este trabajo un documento imperdible acerca de la evolución de un género que pocas veces se atreve a ir más allá de lo establecido por miedo a traicionar sus principios.
7.- Six Magics - "The Secrets Of An Island" (2003, Underground Symphony). A fines de los '90 y principios del nuevo milenio, el fenómeno que generaba el Power Metal, corriente derivada del Heavy Metal que abarcaba la parte más épica y melódica del género, alcanzó su punto culmine de popularidad y vigencia en Europa, especialmente Finlandia (Stratovarius), Suecia (Hammer Fall) Italia (Rhapsody Of Fire) y, obviamente, Alemania (Blind Guardian, Helloween). Aquel fenómeno empezó a expandirse hacia otros rincones del mundo, llegando a Sudamérica y, obviamente, a Chile. Y a pesar de que numerosas agrupaciones nacionales acusaban aquella influencia en sus composiciones, fue la banda liderada por el virtuoso instrumentista Erick Ávila la que logró masificar el género a nivel local, hasta entonces sólo para entendidos. Luego del debut con el conceptual "Dead Kings of the Unholy Valley" (2001), el entonces sexteto se la juega por un trabajo similar, esta vez con un concepto basado en los mitos y leyendas en torno a la isla de Chiloé. Un trabajo excelso, épico, cuyas líricas en inglés exponían al mundo los misterios del folklore nacional generando una atmósfera que a los fans les hizo ver, de alguna manera, que los fantasmas del Caleuche y las fechorías del Trauco podían ser tan enigmáticos y aterradores como las historias de dragones y caballeros medievales propios -en apariencia- del Power Metal.
8.- Inquisición - "Metal Genocide" (2004, Negative). Luego de dos trabajos en estudio promediando la década de los '90 y seis años de receso, el combo liderado por el guitarrista Manolo Schaffler (con paso anterior en Torturer) vuelve a las pistas con un LP (y con nuevo cantante, Paulo Domic, reemplazante de Freddy Alexis, posterior fundador de Witchblade) que marca el resurgimiento del Heavy Metal tradicional cuya producción, a diferencia de antaño, denota una calidad de primer nivel, con un sonido potente y composiciones que reflejan las influencias de un estilo que gozó de gran salud durante los '80. Arreglos sutiles y exquisitos, combinación letal de contundencia y melodía, elementos a los que suma una originalidad tanto en los patrones rítmicos como en las composiciones. Y a pesar de que la misma agrupación se ha referido al reciente "Codex Gigas" (2014) como su mejor trabajo hasta la fecha, está claro que lo hecho en "Metal Genocide" marcó un precedente respecto a la vigencia de un género al que muchos suelen dar por obsoleto. El Heavy Metal nacional, 10 años después, disfruta de un presente que le debe mucho a Inquisición, aquella agrupación que le devolvió al estilo la energía suficiente como para seguir causando estragos. Cortes como 'Caravan Of Death' (alusivo a la Caravana de la Muerte durante la dictadura), 'Raiders' y 'El Libro del Mal' se han ganado el rótulo de himnos para los seguidores del Heavy tradicional hecho en Chile.
9.- Nuclear - "Ten Broken Codes" (2008, Koventry). Puede que para muchos no hayan inventado nada nuevo pero, tal como sus pares suecos de The Haunted a fines de los '90, la banda originaria de Arica se ha hecho un nombre de referencia dentro de la escena extrema tanto a nivel local como internacional, en especial para los amantes del Thrash en su máxima expresión, refrescante, poderoso y sin concesión a nada que les haga tranzar su discurso y agresividad. Característica graficada fielmente en su segundo trabajo, el cual no hizo más que reafirmar el impacto generado con el anterior "Heaven Denied" (2006). Thrash Metal directo, riffs y patrones rítmicos provenientes de la escuela formada por referentes de la talla de Slayer, Testament y Kreator, al que se le suma un discurso acorde a la realidad nacional en estos tiempos: desde la corrupción del poder judicial (‘Sadistic Method For Crime’), hasta las mentiras con que la Iglesia ha enceguecido a la humanidad (‘Fake Messiah’). Cuando la ciudadanía ve, de manera impotente, frustrarse sus sueños por culpa de unos pocos que están en el poder, se genera un ambiente de violencia cuya banda sonora no puede ser más idónea. “Ten Broken Codes” gráfica todo aquello fielmente: música violenta para tiempos violentos.
10.- All Tomorrows – “Opilion” (2011, La Somba). A fines de los ’90, Coprófago era la banda que le daba al Death Metal una identidad en la que la técnica y las composiciones adquirían un nivel de brutalidad equivalente a una calidad instrumental que, para muchos medios, era producto de la influencia por parte luminarias como Meshuggah y los entonces jóvenes Decapitated. Sin embargo, hubo que esperar por muchos años para reafirmar lo que en un principio tuvo apariencia de fenómeno. “Opilion”, la ópera prima de los santiaguinos, no dejó indiferente a nadie. Un álbum bastante variado en el que el Metal “Matemático” adquiere un aspecto carnaza, riffs cuyo peso y dinámica son respaldados por una base rítmica técnicamente bien dotada, capaz de barrer con todos los convencionalismos, incluso dentro de las corrientes más técnicas fuera del Metal. El único 'pero' de la placa: la corta duración (31' aproximadamente), algo perdonable en una banda que saca a relucir un nivel técnico y creativo poco común en nuestro país, como también en el continente. El Metal nacional adquiere, de esta manera, una tridimensionalidad que, hasta hace 10 o 15 años, parecía una utopía respecto a la oleada liderada por referentes como Devin Townsend o los mismos Meshuggah. Coprófago abrió el camino y, una década después, All Tomorrows lo pavimentó a su manera. El nivel de la escena nunca apuntó tan alto.
BONUS TRACK
-Pentagram Chile - "The Malefice" (2013, Cyclone Empire). Luego de poco más de 25 años (durante aquel período hubo un par de reuniones en vivo), llegó el tiempo de saldar una deuda con la historia, aunque también estaba la incertidumbre de la efectividad del "nuevo" material respecto a aquellos años. "The Malefice", el esperado "debut" en grande por toda una generación, hizo justicia a aquella historia con 45' de puro Death/Thrash Metal 100% ochentero, pero con una producción (a cargo del bajista inglés Dan Biggin, compañero de Anton Reisenegger en Criminal) que le da un aire renovado sin prescindir de la esencia más "Old School". Un sonido orgánico, desgarrador y cuidado a la vez, el que genera toda esa atmósfera demoníaca y melodías caóticas que se volvieron marca registrada de la época en que el Metal Extremo (sea Thrash, Death o Black Metal) marcó un hito, para muchos, irrepetible. 'The Death Of Satan, 'La Fiura' y 'Sacrophobia' (Tomas Lindberg -At The Gates-, invitado en las voces) son la evidencia irrefutable de aquel maleficio inmune al paso del tiempo.
-Atomic Aggressor - "Sights Of Suffering" (2015, Hells Headbangers). Si lo de Pentagram fue una deuda histórica, el caso de Atomic Aggressor toma un matiz mucho más íntimo. Con tres demos editados a principios de los '90, y ante la escasez de oportunidades hacia aquellos sonidos no aptos para la difusión radial, hubo que esperar hasta 2007 para la reunión de aquel cuarteto conformado por adolescentes que aun creían en el proyecto a pesar del paso de los años, otros 5 años para el primer LP. Suena extraño hablar de debut cuando se trata de un referente del Death Metal más clásico. Riffs letales que denotan una prolijidad única, respaldados por una producción que mantiene en forma aquella influencia de aquellas glorias como Morbid Angel, Obituary y Possessed, entre otros referentes del Death Metal Americano. Aquellos jóvenes que, 25 años antes, eran considerados la gran promesa de una escena totalmente autogestionada, crecieron y maduraron, pero jamás envejecieron. El esfuerzo y la dedicación tienen su premio, sobretodo en un país adverso para quienes deben tranzar su discurso con tal de ser aceptados por los medios de difusión masiva. "Sights Of Suffering" es mucho más que el debut en grande de Atomic Aggressor. Es una Declaración de Principios de un género que, repito, va mucho más allá de la música.
Escrito por: Claudio Miranda
3 Comentarios
Faltó Undercroft Con el Twisted souls. Fué uno de los mejores de esa época
ResponderEliminarTambien Enigma con el demo "Espacios Vacíos" donde cantaba el batero de los Chancho en piedra
" Pentagram, liderada por un quinceañero Anton Reisenegger, fue la agrupación que encendió la chispa que marcaría el inicio de un movimiento" super clarito amigo, antes de Pentagram hay otras bandas y la que inició el movimiento fue Massacre, reconocida como la primera banda y mas brutal hasta por Anton en la Blowing Thrash año 86 -de la que era editor-, también Massacre grabó los primeros demos del estilo, un año antes que las demás y fueron los organizadores de los primeros conciertos en este estilo, Belial en Valpo igual estaba marcando desde antes que Pentagram y con mucha fuerza, esta bien resaltar los gustos personales o llevarse por marketing de empresarios y productores que manejan ciertas bandas pero de ahí a querer re-escribir la historia es muy distinto, y claro lo del gusto personal se te nota bastante en las producciones que nombras, teniendo otros trabajos que realmente marcaron sus carreras y al colectivo, mejor quedaría "10 placas fundamentales para el autor"
ResponderEliminarFalta "Oppressed By The Force" de Torturer, el primer trabajo Chileno editado en CD por un sello extranjero, Atomic Aggressor NUNCA grabó 3 demos, son 2 y un advance ensayo que no se distribuyó (solamente a sellos y entre algunos amigos), esta web pareciera ser manejada por parientes o cercanos a Anton, muchos mamones para él en este y otros "artículos", otro punto, el Metal Chileno ya tenía un nombre fuera del País al menos una década antes, cuando todo costaba mucho más, por favor no cuesta nada informarse un poquitito, podría seguir aclarando otros errores masivos que tiene esta nota pero quedo acá mejor.
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