Si bien, en una primera instancia, diera la impresión de ser un disco conceptual, al prestarle un poco más de atención, notamos que no lo es, pese a que tiene canciones que hablan de una misma temática, como la ecología y el cuidado del medio ambiente. Este disco consta de 11 canciones que van en una misma línea musical, sin grandes cambios entre ellas o cambios dentro de la misma canción, con solo oír 10 segundos de una canción, ya sabes cómo continuará hasta el final. En ese punto es un disco bastante predecible, sin sorpresas. Quizás en el punto anterior la que muestra una diferencia es Till Death´s Done Us Apart. Tema que muestra algunos cambios, que si bien, tampoco son grandes cambios dentro del transcurso de la canción, si se puede decir que es menos plana que las demás.
Lo más llamativo a simple vista – por lo menos para mí – fue ver una segunda parte del clásico White Pearl, Black Oceans perteneciente al disco "Reckoning Night". Si es por comparar ambas canciones, definitivamente me gustó más la segunda parte que la primera, tiene más del “espíritu Sonata” de la primera época. Esta canción como tal, pasa por varias fases, dándole énfasis a un tema épico, jugando con las orquestaciones y con los cambios de ritmos, bastante llamativo, además con sus 10 minutos de duración, la hacen la canción más larga del disco y la segunda más larga de su discografía después de The Power Of One del disco Silence.
Este disco tiene una característica muy común en el grueso de las composiciones y que es ese toque de melancolía, que si bien no está en todos los temas, por lo menos la mayoría lo trae. Quizás la que más engloba esto es la balada We Are What We Are, canción preciosa que habla sobre como nosotros como la raza dominante somos los que estamos llevando a la destrucción a nuestro planeta. Plantando la idea desde una balada sin sobre saltos, y donde más se ve en forma la voz de Kakko a la hora de interpretar.
Tiene canciones entretenidas como Rise A Night (una de las canciones rápidas del disco), dentro del disco, es una canción que se acerca mucho al Sonata Arctica que tanto encantó a finales de los 90s y principios del 2000, guardando las proporciones. Pero si tiene ese sonido (sobre todo en el teclado) que llama mucho la atención. Life también tiene un estribillo y un coro interesantes, sumado también a una letra muy decidora y cierta, es como que Kakko te estuviera hablando sobre su opinión de la vida.
Para ir resumiendo esto, es un disco que, digámoslo honestamente, no es lo mejor que han hecho, está muy lejos de sus mejores obras, pero si se puede decir que hay una mejora en cuanto a su trabajo anterior. Esperemos que sus futuros trabajos también vayan en alza.
CALIFICACIÓN: 2/5
Escrito por: Fernando Molinet
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