En la jornada del 31 de Julio de 2019, se llevó a cabo el tan esperado concierto de Symphony X, luego de algunos años de receso, la banda de metal progresivo volvió con energías renovadas para realizar su tour por Latinoamérica, bajo el nombre de Odyssey Throught The Underworld Tour.
La apertura del show fue con la canción Iconoclast, en donde los primeros versos no fueron escuchados por los asistentes debido a una falla del micrófono de Russell Allen. Lo que causó cierto desconcierto en el público. Allen pasó a cantar en el micrófono de Michael Romeo mientras tanto el público vitoreaba We are strong, We are ~
Se dio paso a Evolution, lo que desató la euforia de los presentes, que inmediatamente comenzaron a saltar y a moverse en masa, la energía del público estaba a tope. Siguió Serpent kiss y Nevermore, al finalizar la canción se dio espacio a la interacción, bajo un ambiente distendido y con copa en mano Russell saludó al público Chileno, alabando las bondades de la tierra y el brebaje. (De qué procedencia, no lo sabemos, pero de que el vino es güeno… es güeno, salud!).
Se prepara el ambiente para algo más emocional. Russell habla respecto al accidente de hace 2 años atrás, en donde el bajista David Z, de Adrenaline Mob perdió la vida. Sus palabras homenajearon al integrante diciendo que no había ningún día en que no lo extrañara, lo que dio paso a la canción Without you, una canción en que la sensibilidad se deja ver y Allen sabe interpretar, el público acompañó con la voz a Allen en cada parte de la canción.
Para compensar el sentimentalismo y equilibrar emociones, (ya que la lagrimita y la garganta apretada está al borde), nos presentan Domination, Run with the devil y Sea of lies, (Porque somos rudos! lml) canciones que hicieron vibrar al respetable.
Por otra parte, Russell se luce como anfitrión haciendo la dinámica de enfrentar a los integrantes a duelo de instrumentos, un momento divertido y que además, aprovechó para usar algunas palabras en español, alienta al público a gritar y los hace partícipes del reto.
Luces rojas para Set on fire the world, Michael Lepond abre con acordes potentes, el público salta y vitorea, una canción en donde cada Michaels hace lo suyo, se acoplan perfectamente y donde el solo de Romeo deleita a todos los presentes. Se da término a la primera parte del concierto, la gente grita para pedir el regreso de la banda.
El show se reanuda en el encore con The Odyssey ~ (canción que es super nueva y extensa, tuvieron 17 años para aprenderla ;)) que hace al público tararear las partes instrumentales y acompañar a Russell en algunos versos. Una parte de la canción es adaptada para hacer calzar el nombre de Chile en ella, y así dar por finalizado el concierto.
En un show de casi 1 hora 40 minutos, la banda nos dio un paseo por todas sus eras, dejando en claro su experiencia instrumental y sus 25 años de trayectoria. En donde el setlist fue variado y bien escogido. A pesar de los problemas técnicos, pudimos disfrutar de un excelente show, ameno, nostálgico y lleno de energía.
Esperamos con ansias un nuevo disco y otra gira por supuesto. *cof cof*
*En Spotify se agregará el disco Paradise Lost este 12 de Agosto. Ahí la dejo, bye ~
Escrito por: Jovelly Pino
Fotos por: Diego Pino
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