Miércoles con sabor a viernes o algo así, el pasado 7 de diciembre era para celebrar debido a que Samael regresaba a Chile con su show aniversario del disco Passage, una de las obras más importantes en el legado del conjunto suizo que sería interpretado de forma íntegra en este nuevo tour.
La agrupación debutó hace unos años en el país - ocasión en la que también estuvimos presentes y que tuvo el siguiente review - pero este show ya nos traía más preparados. La voz se había hecho correr y todos venían listos para lo que sería un show, potente, intenso, corto (hasta donde se sabía) y lleno de energía.
Para comenzar con lo pactado los nacionales de Folkheim salieron a la Blondie unos minutos antes de lo programado, apoyado de imágenes del pueblo Rapa Nui, Mapuche y Selk' Nam la agrupación local comenzó con los clásicos "1781" e "Hijos del Salitre".
Utilizando una formación "histórica" por decirlo así - debido a que colaboraron varios amigos y ex integrantes - lo de Folkheim siempre es de calidad. Un show a la altura de una de las leyendas del metal nacional que saca toda su epicidad a la hora tocar y que frente a cualquier complicación (en este caso unos detalles de audio), todos saben qué hacer y cómo moverse para aprovechar el tiempo que hay en el stage.
Pero creo que lo más importante de destacar de los locales es el respeto, la solemnidad y fuerza que hay en su entrega, donde se cree en cada palabra que dicen y representan con el legado de tantas culturas en un show de 30 minutos. Prueba de ello fueron las interpretaciones de "Kiepja" o "Vaai Honga Kaina" que incluyeron segmentos chamánicos, danzas y hoko. Folkheim como siempre es sinónimo de legado, metal y calidad.
Más entrada la noche y unos cinco minutos antes de las 21:00 hrs Samael salió a escena, liderados por Vorph el conjunto no perdió tiempo en saludos ni nada, vamos de lleno a lo bueno y a celebrar con todo el aniverario de Passage, donde "Rain" se tomó la Blondie y de ahí en adelante todo es disfrutar.
Saltos, gritos, cantos y baile, parecía cualquier otra noche de Open Blondie y Samael lo sintió así en todo momento. Jugando de locales los suizos comenzaron un show espectacular, que permitía apreciar cada detalle de las guitarras y voz, todo complementado por la batería de Xytras que era electrónica y apoyada de unos cuantos toms y platillos.
Mencionar uno a uno los temas de Passage sería redundante (si sabemos que el show era de eso), pero los putos más altos a desatcar fueron sin duda fueron "Angel's Decay", "Jupiterian Vibe" (con luces azules muy al estilo del videoclip), "Moonskin" y "Born Under Saturn". Un set de lujo para un discazo de la carrera de Samael y que una vez concluido la banda abandonó el escenario. Sólo habían pasado 50 minutos de show.
Hasta este punto va una noche impecable y Samael cumplió con lo prometido, reviviendo uno de sus trabajos más icónicos y con un sonido de primer nivel. La Blondie prendida como si fuera viernes clama por el regreso del conjunto y este no se hace esperar para retomar sus posiciones.
Vorph agradece a todos los presentes y anuncia que aún les queda material por presentar y fue la misma "Samael" que nos regresa al beat y atmósfera oscura en que estabamos antes. La fiesta no parece querer terminar y la banda empieza mostrar los primeros cambios en su setlit, debido a que las primeras fechas de este aniversario sólo tenían tres temas de encore, pero como te mencioné arriba el 2020 dejó una sensación de confianza y esa localía la aprovecharon para traer un show íntegro.
De la mano de "Luxferre", "Son Of Earth", "Infra Galaxia" y más es que van atrapando a los asistentes, en un encore que se siente más como una segunda parte del show. Quienes creían que esto sería cortito que se preparen porque aún queda energía en el tanque y como dijo Vorph, nadie se puede ir sin "Baphomet's Throne".
La agrupación baja del escenario y el público de Blondie quiere seguir el carrete. El griterío es impresionante y los presentes siguen pidiendo a Samael, lo que es una gran señal del show que están ofreciendo, debido a que a esa altura no es como que te falten temas, sino que todo el ambiente está dado para seguir con la jornada.
Ales Campanelli y Drop salen claramente emocionados por la recepción de los fanáticos, les falta cara para la sonrisa que llevan y Xytras regresa entre saltos a su posición, sólo cuando llega Vorph la fiesta se vuelve a desatar en Blondie y la jornada sigue con un segundo encore.
La parte final del show cerró con el tridente de "Into The Pentagram", "Slavocracy" y "Black Supremacy" que dieron broche de oro a una jornada de lujo y que siguen reforzando el vínculo de los suizos con la fanaticada chilena.
Lo de anoche se sintió como una Open Blondie más, como cuando decide que quieres pasar un buen rato y necesitas una carta segura y que no falle al tener una propuesta variada, eso fue el show de anoche. La apuesta era ir a disfrutar de Samael con su mejor disco, pero el conjunto también confió en la entrega de los chilenos y no se guardo nada en un setlist que venía planeado desde el principio para dos encore.
Performance de primer nivel y que nos demuestra que la oscuridad viene en diferentes sonidos, ya sea folk o black industrial, todas las formas son válidas a la hora de llegar con tu mensaje y de dejarlo todo arriba en el escenario.
Anoche todos pudimos viajar gracias a estas dos bandas, ya sea a tierras ancestrales o a parajes de una luna lejana, incluso viajamos del miércoles al viernes, pero lo importante es que la música con sus diferencias vuelve a encontrar para celebrar y disfrutar.
Por Felipe Pino Guerrero
Fotografías de Antonia Bisso
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