Luego de una ventana entre anuncio y estreno bastante amplia, que a más de alguno impacientó (me incluyo) por fin tuvimos la posibilidad de ver finalmente el esperado documental "Dio: Dreamers Never Die" (2022), que prometía hacer un exhaustivo recuento de una de las voces más importantes del Heavy Metal y que no podíamos dejar pasar la oportunidad de revisar.
Antes de comenzar, se me hace necesario mencionar que nunca he sido muy fan de Dio, la eterna pelea entre Black Sabbath con Ozzy versus Black Sabbath con Dio para mí siempre ha estado clara (soy #TeamOzzy, vengan de a uno) y con respecto a su carrera solista las veces que he escuchado sus discos, si bien es cierto jamás los he encontrado malos en lo más mínimo, entiendo que su música no es para mí, como me pasa mucho en particular con el Heavy Metal, sin embargo ésto me ha traído curiosas discusiones a lo largo de los años, con fans de Dio que toman mis palabras como un ataque o una ofensa hacia él, cuando simplemente no es así, es sólo que su música no me llega de la forma que a muchos, MUCHOS pareciera llegarles. Dicho ésto cierro éste innecesario párrafo donde hablo de MI, añadiendo que, a pesar de todo ésto, siempre he tenido un profundo respeto y admiración por el señor Ronald James Padavona, todo lo que él representa y su innegable influencia en la música que más amo.
El documental narra cronológicamente la vida y obra de Dio, partiendo con su niñez, donde se nos deja muy en claro la relación con sus padres y la importante figura de su abuela, cómo aprendió a tocar la trompeta siendo un niño, pasando a ser un joven rebelde, siempre con ganas de hacer música, empezando con la Trompeta, pasándose al bajo y formando varias agrupaciones, siendo ELF una de las más recordadas, que gracias a una gira de apoyo a Deep Purple, fue la carta de presentación entre él y Richie Blackmore, con quien formaría Rainbow.
El resto es historia conocida, cómo comenzó con Black Sabbath, grabando dos álbumes que revivirían a una agrupación que venía de capa caída gracias a un Ozzy Osbourne cada vez más impredecible producto de las drogas y el alcohol, renovando las energías dentro de la banda haciendo de ésta algo más teatral, introduciendo la mano cornuta al imaginario popular y el desastre post "Live Evil" (1982) que lo llevó a fundar su propia banda, con su nombre y comenzar así una exitosa carrera como solista.
Cabe recalcar que durante todo el metraje tenemos comentarios de gente involucrada en su vida, Partiendo su pareja, Wendy Dio, quien es la que se lleva gran peso de éste documental y de quien poco hemos sabido a lo largo de la historia ya que su relación era de carácter privado y eso siempre se respetó. Tambien hay entrevistas con productores y amigos del músico, contamos con apariciones como Rob Halford de Judas Priest, Sebastian Bach, Eddie Trunk, Jack Black, Tony Iommi, Geezer Butler, Lita Ford entre otros, detallando cada paso del músico a lo largo de su carrera y mostrando su lado más humano, siendo un buen amigo y una buena persona, que se desvivía por sus fanáticos y siempre tenía una actitud positiva y alegre por la vida, actitud que ni siquiera el cáncer le pudo quitar.
Otro punto importante es la historia de Dio sobreviviendo a los 90s, época cuando la música fue girando más hacia el rock alternativo e indie y parecía que Dio no sería relevante nunca más, ésto me parece muy interesante tanto desde el punto de vista de quienes estuvieron allí, como desde una mirada histórica de la música, habiendo cambios generacionales que marcan época, pero con respecto a Dio, el siempre estuvo allí poniéndole el hombro a la situación, hasta que logra formar Heaven & Hell, y grabar su canto de cisne “The Devil You Know” (2009), disco que no pudo ser una mejor despedida para un artista tan grande, yéndose en lo alto.
Recorrer la vida y obra de un cantante tan emblemático como Ronnie James Dio siempre va a ser motivo de interés para quienes gozamos de cualquiera de las variantes del metal, e incluso llama a revisar nuevamente su música ,cosa que pude hacer yo mismo mientras escribía ésta review,y a pesar de lo que escribí en un inicio pasé un gran momento gracias a "The Last in Line" (1984), pero lo más importante, es que éste docu nos muestra a una figura incansable, que luchó por años haciendo lo que amaba por un amor al arte y a sus fans y nos confirma que son personajes como él quienes nos demuestran que los soñadores nunca mueren.
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