La semana pasada hablamos de dos bandas que vendrían a representar un poco el heavy y el metal más orientado a lo clásico (o neoclásico si quiere meter ahí a Stratovarius), hoy es el turno de dos bandas cuya brutalidad reina por sobre todo, pero que han sabido mantener sus carreras por largo tiempo y seguir produciendo material desde el espectro más extremo de la música.
Benediction:
Fundados a finales de los 80s, Benediction ha sabido mantener una carrera en base a pura brutalidad, que en la primera mitad de ésta lograban sacar disco tras disco de forma consistente, cosa que cambió en los últimos años, pero aún así han logrado mantener la energía constante con riffs pesados y una voz que sólo se ha ido haciendo más y más corrosiva con el tiempo.
Discografía Recomendada:
Si bien es cierto es seguro decir que su debut “subsconcious Terror” (1991) es un buen punto de partida, no es sino hasta “The Grand Leveler” (1992) donde encuentran su voz, su sonido, pero es para mí “Transcend the Rubicon” (1993) donde todo emerge de forma orgánica y tenemos un álbum supremo. Imposible me resulta también dejar fuera su más reciente placa “Scriptures” (2020) donde muestra que la banda sigue vigente y con mucho que mostrar en sus más de 30 años de historia.
Napalm Death:
Se hace difícil poder resumir en un párrafo la larga carrera y discografía de los Napalm, ya que desde sus inicios a comienzos de los 80 han sacado una gran cantidad de material, sin embargo, su visión se ha mantenido intacta con los años, siempre críticos con la política y contra el fascismo. Napalm Death es de esas bandas que marcan un antes y un después, siendo apuntados como los creadores del Grindcore, trayendo una actitud punk a una escena metalera más o menos apolítica hasta ese entonces, pero ésto no queda ahí ya que con los años han incursionado en alguna que otra sección de voces limpias, innovando aún cuando ya tenían la etiqueta de “veteranos” a sus espaldas.
Discografía Recomendada:
Cada vez que escucho a Napalm me veo escuchando en su mayoría los discos que grabaron con Lee Dorrian en la voz, y es que desde “Scum” (1987) hasta “Harmony Corruption” (1990) no hay un sólo tema malo, sin embargo, digo ésto sin desmerecer a nada al señor Barney Greenway, por que desde “Utopia Banished” (1992) hasta hoy el aporte de él ha sido innegable, siendo “The Code is Red, Long Live the Code” (2005) uno de mis favoritos, sin embargo, su última placa “Throes of Joy in the Jaws of Defeatism” (2020) muestra que Napalm Death” tiene cuerda para rato.
Recuerda que quedan pocas entradas para ser parte del regreso del Metal Fest y que puedes adquirir tus entradas bajo el sistema Puntoticket.
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