La noche comenzó con la banda nacional Killa Reviver, un grupo joven que aprovechó esta increíble oportunidad para presentarnos casi en su totalidad su primer disco de estudio, llamado "Season One", lanzado este año.
A pesar de ser una banda realmente joven y de que, como admitieron, esta era la tercera vez que se presentaban en vivo, dejaron claro que cuando hay talento e ideas claras, no solo musicales al momento de componer, sino también hacia dónde se desea llevar el proyecto, la experiencia es solo una forma epistemológica de medir el paso del tiempo, un simple número.
¿Por qué digo esto? Porque, a pesar de que hubo serios problemas de sonido donde a veces se perdían ciertos instrumentos, la banda, liderada en todo momento por su gran voz, Tim Sepúlveda, supo salir adelante de este impasse con una presentación potente, enérgica y emotiva que fue recibida de una forma maravillosa por el público que se encontraba en ese momento en el Teatro Teletón, por lo que aplausos, gritos y saltos fueron lo que menos faltó durante la presentación.
Con canciones como "Empire", "Collide", "Legado" y "Nankurunaisa", Killa Reviver dejó en claro que la confianza depositada por todos quienes votaron fue retribuida con creces, y así también, me imagino, lo percibieron ellos con un público que los apoyó durante toda su presentación. Sinceramente un número que estuvo a la altura de lo que veríamos a continuación.
Con una fanaticada absolutamente emocionada a esta altura, y con algunos desmayados desde el minuto 1, comenzó la presentación del cuarteto de San Diego, iniciando con una intro sorprendente: "El Rey" de Vicente Fernández, dando paso a lo que sería un setlist de 13 canciones que desatarían la euforia, la alegría y un descontrol total de los asistentes en el Teatro Teletón.
Pierce The Veil no escatimó en esta presentación, "no reparó en gastos" y sacó lo mejor de su arsenal, demostrando la estampa de ser una de las bandas pilar del movimiento post-hardcore estadounidense. A pesar de que su gira era y serviría como promoción de su más reciente trabajo, "The Jaws Of Life", placa de la cual presentaron "Death of An Executioner", la potente y movida "Pass The Nirvana", y la emotiva "Emergency Contact", su fuerte fue mirar un poco hacia atrás, al pasado, que sirve como ejercicio catártico para darse cuenta de que esto no fue un movimiento fugaz, sino algo que marcó a una generación que se introdujo en la música.
Así, temas como "Caraphernelia", "Bulls In The Bronx" o "Circles" sonaron y fueron coreados por todos los rincones del teatro, al punto de que, aunque a veces la voz de Vic se perdía por instantes debido a problemas recurrentes con el audio, el público tenía tan grabadas en su mente y en el corazón las letras que poco y nada les importó más que cantar y llorar, si lo sentían necesario, con cada verso.
Asimismo, la energía que desplegada, transmitida de manera de feedback, entre el público y los músicos era realmente fuerte. Sobre todo con todo lo demostrado, saldo, bailado y cabezeado por su bajista Jaime Preciado, que, al igual que Vic, mantuvieron durante el show una constante, amena y cálida cercanía con los asistentes.
El show tuvo dos momentos muy emotivos, el primero se dio cuando Vic, acompañado solo de su guitarra acústica, hizo cantar al unísono y derramar un par de lágrimas a todos con "Bulletproof Love". Luego, ya finalizando el mainset, Vic subió a una fanática al escenario para cantar frente a ella "Hold On Till May", algo que se quedará para siempre en sus recuerdos y en la grabación de su celular que no soltó en ningún momento para atesorar ese momento mágico.
Para finalizar, presentaciones como la vivida ayer 7 de abril son capaces de reconstruir ciertos relatos a nivel musical y de identidad generacional. Muchos han roto la cabeza tratando de definir el sonido que caracteriza a esta generación que, en gran parte, ha alcanzado los treinta años.
Me aventuro a hipotetizar que, para muchos, el sonido post-hardcore-pop punk se ha arraigado tanto que no fue una simple "etapa" como se lo pudieron haber dicho sus familiares, sino que el mensaje se introdujo tan fuerte en sus mentes que les brindó una forma de ver la vida. Tal vez las planchas para el pelo, los parches en la mochila, los delineadores, la ropa con colores negro, rojo y blanco, el maquillaje y las tinturas hayan quedado atrás, pero la visión se mantiene intacta y el mensaje más presente que nunca.
GALERÍA COMPLETA KILLA REVIVER
GALERÍA COMPLETA PIERCE THE VEIL
Review Gonzalo Ruiz
Fotografías Diego "Tio R" Pino
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