#Especial: Tenemos Explosivos: Relato musical contra la superestructura

 


En este blog he hablado muchas veces de la importancia, aún no reconocida a mi parecer, que tiene la banda Tenemos Explosivos más allá del arte musical, de su sonido y de sus enérgicas presentaciones que los llevan a sold out cada año en que Eduardo Pavéz nos visita en Chile, pero esta vez quiero seguir hilando fino con el significado que hay en la especial forma que tiene el relato musical de esta banda.

Sí, lo más fácil en todo aspecto es criticar de manera facilona la política, al sistema económico o a la sociedad, lo complejo es entregar y desplegar un mensaje, un relato, capaz de desestabilizar toda la superestructura, de sacarnos del engaño y que podamos visualizar que la realidad es construida, y esto solo se logra con certero mensajes contingentes que le dan una doble mirada a los acontecimientos. Y no solo eso, si bien la letra es creada bajo un contexto y pensamiento, al igual que lo decía Derrida, las letras de Tenemos Explosivo se escapan a su autor, traspasando y entrelazándose, tomando vida propia, necesitamos más lecturas subversivas de los textos, en este caso de las letras, en este caso del relato musical. 

Por ejemplo, en el clásico "El Misterio de Kosovo" relatan en primera persona como se vive un exterminio y limpieza étnica con mensajes tan crudos que muchas veces solo las víctimas lo pueden expresa "las paredes que creamos están ahora en el suelo. están a nuestros pies.", mensaje y directo que nos recuerda a lo que ocurre actualmente con el conflicto en Palestina.

Toma fuerza en el último tiempo desenmascarar lo cada vez más evidente del sistema neoliberal por su enaltecimiento del individuo y de la libertad, de que estamos solos, que somos una suma de individuos y no una comunidad, que somos un apilamiento y no una fuerza política distinta, así en Cultura de Servidumbre disparan de entrada con "Lo que hay que derribar es el mito del individuo que intenta salvarse solo".

Por último, ante este panorama mundial en el que nos encontramos ¿donde estamos situados? ¿Hay esperanza o no la hay? ¿hay alternativa o no la hay, como dijo Margareth Tatcher? y es acá donde hay un mensaje mucho más certero y desolador, estamos incluso en un espacio de "Inesperanza", como lo relatado en "Serpientes Lactantes", "estás templado me dice la voz, estás temblando como un estúpido me repeite, y tiene tanta razón, tengo el estómago vuelto hacia fuera ya ni siquiera puedo sentir mis manos" en medio, en medio de todo, donde nada existe, donde tenemos que salir ¿cómo? atacando la superestructura de todo, revelando la ideología que todo lo distorsiona, porque nada es cierto si al final de todo está el temor, y porque sacarnos las gafas de la ideología, debido a la reveladora verdad, que armará surcos en la piel que para muchos serán imborrables.

No debemos quedarnos simplemente en la pura crítica, debemos actuar, derrumbar la estructura, romperla y revelarla, todo la realidad misma sustentada en el un sistema económica capitalista y político neolilberal, la realidad misma manejada para vivir siempre el realismo capitalista, perdamos la esperanza, abrasemos el individualismos exaltado, vivamos acelerados, vivamos útiles, menos ocio más productividad, como mano de obra, como un capitalismo que nos come a diario, eso debemos derribar y revelar, y Tenemos Explosivos nos da una mano para entenderlo.

Tenemos Explosivos será una de las importantes cartas nacionales en el tan esperado Lollapalooza 2024. Las entradas ya están a la venta a través del sistema Puntoticket.


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