“Nos hemos convencido que la música debe ser un espacio personal pero a la vez compartido y por sobretodo, seguro”.
La fuente de inspiración para Engañando a Murphy son bastante claras en este segundo trabajo: videojuegos de los 90, sonoridad espacial, resiliencia y el amor, como fórmula fundamental que contiene a ésta bien trabajada pieza musical que se ha abordado desde la nostalgia pura pero con la mirada actual.
La banda chilena lleva un año trabajando intensamente en este anuncio, primero con los estrenos de seis sencillos a lo largo del 2023 y parte de este 2024, los lanzamientos fueron una tarea dura, pero no imposible. Siempre tuvieron en mente pulir esta historia como un disco conceptual, desde lo visual con las portadas pixel art, hasta la identidad sonora de las canciones, logrando así, fusionar las ideas en una obra completa que promete un viaje al espacio de ida y vuelta.
Son 16 canciones que rescatan parte la nostalgia de los juegos arcade, pero con la frescura de letras y temáticas actuales. Además, siempre se han sentido influenciados por referentes actuales como Hans Zimmer, sobre todo con el BSO de Interstellar, también con algunas épocas de Luis Alberto Spinetta y Gustavo Cerati, incluso sonoridades propias de bandas insignes del grunge y el rock psicodélico de los años 70.
A diferencia de su álbum anterior llamado “Otra Dimensión” que tuvo grandes colaboraciones de Lula Bertoldi, vocalista de Eruca Sativa, Luciana Segovia y la banda chilena Reina Luisa, resultó un disco mucho más introspectivo. En cambio hoy, “Game Over”, es todo lo contrario, siendo un disco que invita a la expresión, al sentir y a abrazar con ganas el mensaje de la superación de momentos difíciles, la resiliencia como catarsis del “seguir adelante”, pero que invita a tomar acción, no quedarse en el pensamiento o en la idea “de”, esto puede saberse en lo personal o en lo colectivo quedando al sentir de quién escuche.
En palabras de Cris Hidalgo, este disco también aborda la reflexión de la realidad de la música emergente actual, con respecto a ello y la dificultad que tienen los miles de talentos que hoy intentan vivir de este oficio noble nos cuenta: “Nos hemos convencido que la música debe ser un espacio personal pero a la vez compartido y por sobretodo, seguro y seguiremos luchando por abrir un espacio para las personas que están más alejadas del mainstream actual, que quieren estar lejos de lo polémico de sentirse etiquetado forzosamente, pero cerca de los que sólo buscan estar y ser en un momento determinado sin tanta presión”, para ellos es este disco, reafirma.
Este álbum “Game Over” se grabó y produjo en Casona Nodriza y la portada del disco estuvo a cargo de Alef Sanchez, quién también realizó la portada del disco anterior y de los sencillos. El disco “Game Over” ya se encuentra disponible en todas las plataformas de streaming.
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