Cada vez que se nos menciona a Iron Maiden se nos vienen dos cosas a la cabeza, Eddie y las presentaciones rimbombantes, siendo éstos dos elementos la sinergia perfecta para una banda que a la hora de tocar en vivo desde siempre que lo ha intentado todo, y con todo nos referimos a TODO.
Desde los humildes comienzos en bares y pubs de Londres en el cual su vocalista anterior Dennis Wilcock introdujera ciertos elementos teatrales y cercanos al Shock Rock al ser muy fan de Kiss, siendo principalmente el uso de pintura facial y un show que consistía en pasarse una espada por la boca para hacer salir sangre, cosa que evolucionó en una máscara una vez que éste salió del grupo, bautizando así a la mascota de la banda como Eddie the Head. Lo que sería un simple gag visual para llamar un poco más la atención de la audiencia con el tiempo devendría en una compleja maquinaria que a día de hoy convierte a Iron Maiden en uno de los shows más espectaculares para disfrutar en vivo.
Según el documental “The History of Iron Maiden Part 1: The Early Days” (2004) la idea de ésta cabeza originaría al Eddie que todos conocemos hoy por hoy, concepto ampliado profundamente gracias al ilustrador Derek Riggs, aunque ésto ya sería una historia para otra ocasión, ya que venimos a hablar de los shows en vivo de Iron Maiden. La inclusión del caezón Eddie en los shows se daría de forma muy temprana como soporte de los primeros álbumes de la banda, y aunque las primeras apariciones serían modestas si las comparamos con las más actuales, no dejaba de ser vistoso y pintoresco ver a un Eddie revolotear por el escenario mientras la banda se dedicaba a su performance.
Con el pasar de los años las presentaciones de la doncella ser harían en lugares cada vez más grandes, lo que les permitía a los ingleses disponer de más espacio, que rápidamente fueron ocupando con propuestas escénicas más complejas llegando incluso a tomar un tono más teatral, si a ésto le sumamos el histrionismo de Bruce Dickinson veríamos que ahí había una fórmula ganadora, fórmula que se mantiene hasta el día de hoy, ya que con el tiempo las presentaciones de Iron Maiden se han vuelto cada vez más bombásticas.
Tal como ha pasado con los álbumes, en vivo pareciera que la tecnología estuviera al servicio de la banda a la hora de hacer sus shows cada vez más cautivadores, inmersivos si se quiere, ya que el uso de lasers, pirotecnia, utilería de lo más diversa, pantallas o cómo el propio escenario cambia representando cada una de las etapas de la doncella, como lo sucedido en su anterior gira “Legacy of the Beast”.
Iron Maiden es una banda que ha sabido sacarle provecho a su puesta en escena de tal manera que, sin importar las veces que hayas visto a la banda en vivo, siempre va a haber algo nuevo que ver en sus recitales, el propio Rod Smallwood (mánager) dijo una vez en una entrevista para la Metal Hammer "La planificación de una gira comienza con una pregunta: ¿cómo hacemos algo que nunca antes se haya hecho?" y eso es algo que se puede escuchar, ver y sentir con cada presentación de la doncella, haciendo que cada concierto sea simplemente una experiencia completa.
Recuerda que Iron Maiden vuelve a nuestro país por partida doble el 27 y 28, quedando sólo entradas para el día Jueves 28 bajo el sistema Ticketmaster.
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