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Foto cortesía de Mariano Beuses, Rock A La Vena, Juglar Producciones |
Saurom Jungle Fest (Día 1):
El pasado viernes 11 de abril, el Teatro Cariola fue testigo de la primera jornada del Saurom Juglar Fest, un evento que reunió la energía, nostalgia y virtuosismo del mejor metal europeo. En esta primera noche, el encargado de abrir los fuegos fue nada menos que Fabio Lione, exvocalista de Rhapsody of Fire, quien volvió a suelo chileno tras su reciente visita en febrero, esta vez para entregar un set cargado con lo más glorioso del power metal sinfónico.
Apenas sonó la intro del legendario disco Dawn of Victory, el público chileno respondió con entusiasmo. "Lex Triumphans" resonó con fuerza, seguida de inmediato por "Dawn of Victory", desatando la primera gran ovación de la noche. Desde el arranque, la conexión entre Fabio y el público fue total: miradas cómplices, manos alzadas y una energía que se sentía en cada rincón del recinto.
Con "Wisdom of the Kings", el público estalló en un coro ensordecedor. No hubo respiro para los asistentes, que coreaban y saltaban sin cesar. Fabio, impecable como siempre, agradeció la entrega con una sonrisa que lo acompañó toda la noche.
Luego, llegó "The March of the Swordmaster", una pieza con entrada épica y un riff más cargado que hizo cabecear a todo el Cariola. Fue un pequeño descanso para los pulmones, pero no para el cuello. La banda, precisa y potente, sostuvo el ritmo sin titubeos.
La siguiente en sonar fue "The Village of Dwarves", donde Fabio mostró su lado más virtuoso: gritos operáticos, control absoluto del escenario y un despliegue vocal que dejó a más de uno con la boca abierta. El respetable no se quedó atrás, acompañando con palmas y vítores cada una de sus intervenciones.
Con una suave intro de flauta, se abría paso "Lamento Eroico", uno de los momentos más emotivos de la noche. Fabio presentó la canción con humildad, y el público respondió con un aplauso largo y sentido. La interpretación fue sublime, con un rango vocal que osciló entre la melancolía y el éxtasis, mientras el público chileno observaba, atónito y conmovido.
Acto seguido, la velocidad volvió de la mano de "Land of Immortals", con un doble bombo atronador y un público completamente encendido. Los coros eran tan potentes que por momentos parecía que la banda tenía cien voces más sobre el escenario.
La épica "Unholy Warcry" llegó con un estallido: los primeros acordes fueron suficientes para levantar al público una vez más. Gritos, saltos, puños en el aire; la conexión con Fabio era absoluta.
Pero si había una canción esperada por todos, era "Holy Thunderforce". Fabio lo confirmó al anunciar que era su favorita, y el público no necesitó más: una explosión de saltos y gritos llenó el recinto. Fue sin duda uno de los puntos más altos del show, donde el Cariola vibró con una energía difícil de describir.
La calma llegó brevemente con una pieza más melancólica, nuevamente acompañada por flauta. El ambiente se volvió íntimo, pero no menos intenso. Fabio dialogó con el público, preguntó si querían más, y con una sonrisa apuntó el micrófono hacia una fan, quien con emoción dio paso a "Eternal Glory". El público respondió con los clásicos “¡Eh, eh, eh!” y hasta se armó un pequeño mosh en cancha, demostrando que la energía aún no se agotaba.
El cierre fue simplemente glorioso: "Emerald Sword" desató el canto colectivo más poderoso de la noche. Todos sabían que era el final, y lo dieron todo. Saltos, brazos al aire, fans llorando de emoción, y un Fabio que, agradecido, se despidió con un aplauso sentido y una promesa tácita de volver.
El Saurom Juglar Fest comenzaba de la mejor manera posible, con un Fabio Lione entregado, una banda sólida y un público chileno que, una vez más, demostró por qué es uno de los más apasionados del mundo. Una noche donde la fantasía, la nostalgia y el power metal reinaron con gloria.
Setlist Fabio Lione:
Lux Triumphans (Rhapsody of Fire song)
Dawn of Victory (Rhapsody of Fire song)
Lamento eroico (Rhapsody of Fire song)
Unholy Warcry (Rhapsody of Fire song)
Eternal Glory (Rhapsody of Fire song)
Epicus Furor (Rhapsody of Fire song)
Emerald Sword (Rhapsody of Fire song)
Z Legacy el proyecto musical liderado por Javier Domínguez, conocido artísticamente como Zeta, quien fue vocalista de Mägo de Oz desde 2012 hasta su salida en 2023 se presentó ante un público chileno completamente encendido, en una jornada marcada por la entrega, la energía y el cariño mutuo entre artistas y asistentes. Desde los primeros acordes, la noche prometía ser inolvidable, y vaya que lo fue.
Apenas apareció la banda en escena comenzó a sonar el primer tema —enérgico y contagioso—, el público explotó en gritos y aplausos, marcando el inicio de una presentación cargada de emoción. El bajista, con una presencia escénica arrolladora y una simpatía natural, no tardó en conectar con la audiencia, haciendo del escenario un espacio compartido, más que una tarima distante. La respuesta del público chileno fue inmediata y apasionada, con gritos y cánticos que estremecieron el recinto.
Uno de los momentos más emocionantes de la velada fue la aparición de Patricia Tapia, la también ex de Mägo de Oz quien fue presentada en medio de una ovación estruendosa que dejó en claro el cariño que el público chileno le tiene. El aplauso fue tan largo como emotivo, envolviendo el ambiente en un aura de admiración y respeto.
Aprovechando ese hype, la banda siguió con el show, que terminó de encender los ánimos. La audiencia, completamente entregada, coreaba con fuerza el nombre de la banda: “¡Zeta! ¡Zeta!”. La energía era tan intensa que se sentía casi eléctrica, con la cancha y la platea vibrando al unísono.
Canción tras canción, los coros se multiplicaban, los clásicos eran coreados por todos, y hasta se escucharon poderosos “¡eh, eh, eh!” que acompañaban el ritmo desde las gradas. La entrega del público chileno no dio tregua. Incluso en los momentos más tranquilos, la audiencia no se desconectaba, escuchando con atención cada matiz musical.
Uno de los puntos más altos de la noche fue “En la Antártida”, que sorprendió con un riff pesadísimo adornado con sintetizadores, ideal para el headbanging colectivo que se desató. El público no dudó en sumarse al ritmo, generando una marea de cabezas que se movían al compás del poder sonoro de la banda.
Le siguió un clásico, que desde su primer compás hizo saltar frenéticamente a todos los presentes. La euforia del público chileno se desbordaba: no había un solo rincón del lugar sin movimiento, sin gritos, sin emoción.
En una de las baladas más emotivas de la noche, la participación del público fue total. Cantaron con el alma, acompañando a la banda en casi toda la canción. Fue uno de esos momentos mágicos donde artista y público se funden en una sola voz, y Chile supo entregar ese instante con el corazón en la mano.
Cuando comenzó una nueva canción con un intro de sintetizador, los aplausos marcaron la pauta, anticipando otro gran momento. Fue entonces cuando la banda presentó a Sebastián, recibiendo otra calurosa ovación por parte del público chileno, que no dejó de demostrar respeto y entusiasmo en ningún momento.
El cierre llegó con un tema de tintes más glam, donde cada integrante de Z Legacy se lució sin contención. La gente no solo prendió con fuerza, sino que acompañó con aplausos al ritmo de la canción, coreando, saltando y entregando la última gran descarga de energía de la noche.
Z Legacy demostró por qué sigue creciendo en la escena: con un show sólido, lleno de matices, momentos memorables y, sobre todo, una conexión genuina con un público que lo dio todo desde el primer minuto. El público chileno, fiel y apasionado, fue una parte esencial de esta experiencia. Una noche para recordar.
Intro Z Legacy - Primer Encuentro Directo al Cielo Xanandra Los 1000 Guerreros El Libro de las Sombras Cadaveria Destino Vega Un Ser Reptiliano (La Antártida) Revolución La Dama del Mar Pegasus Fantasy Siempre Debemos Luchar (La Batalla de Tiamat) El Traidor Vuela Alto
La primera noche de Saurom en Chile fue todo lo que los fanáticos soñaban… y más. En un espectáculo que fusionó teatro, música, emoción y una fiesta de dimensiones épicas, la banda gaditana convirtió el recinto en una celebración juglar sin comparación. Desde el montaje, con los músicos entrando sin protocolos al escenario y siendo reconocidos y ovacionados por el público chileno, se sintió que algo especial estaba por comenzar.
La apertura estuvo a cargo de "El Principito", una intro de su nuevo disco que transportó al público con una puesta en escena particular: músicos encapuchados, luces tenues y una atmósfera mágica. Mientras el público, ya impaciente, miraba atento, el telón se levantó por completo y Saurom apareció con todo. El inicio fue demoledor con "Irae Dei", impulsado por un riff rockandrolero que encendió de inmediato la cancha. Los “¡eh, eh, eh!” del público marcaron el pulso de una apertura cargada de fuerza y entrega.
Con "La hija de las estrellas", la comunión fue total: el público coreó la intro junto al vocalista con potencia, haciendo temblar el lugar. El vocalista de Saurom Miguel Angel Franco agradeció con calidez la asistencia, emocionado ante la respuesta fervorosa de los asistentes.
Llegó el turno de "Músico de calle", y con su intro de violín la energía siguió en aumento. El público, completamente motivado, formó una ronda entre abrazos una especie de “mosh fraternal” bailando al ritmo frenético de la canción.
En "La batalla con los cueros de vino", la fiesta alcanzó otro nivel. La gente en platea se puso de pie para saltar este temón, mientras las gaitas salieron a escena provocando una explosión de entusiasmo. Hubo incluso una coreografía entre gaiteros que se ganó un “¡Ole, ole, ole, Saurom!” masivo desde todos los sectores. Un momento que quedará grabado en la memoria de todos.
"Mejor sin ti" no bajó ni un ápice la intensidad: la audiencia gritó la canción desde el primer acorde, transformando el recinto en una verdadera fiesta pagana, con cánticos y saltos que contagiaban a cualquiera.
"Soñando contigo" trajo un momento más cálido, con una hermosa intro de mandolina y flauta traversa. Aun así, el público chileno no bajó la guardia: siguió cantando, aplaudiendo y participando activamente, como lo hizo durante casi todo el concierto.
Uno de los momentos más emotivos fue "Cuando nadie nos ve", con una introducción al piano que encendió los celulares y encendedores, iluminando el lugar con una mística inigualable. Una postal que hablaba de la conexión entre banda y audiencia.
Con "El monte de las ánimas", el show viró hacia una intensidad más oscura y poderosa. Acompañado de sonidos que simulaban latidos de corazón y una atmósfera casi cinematográfica, fue aquí donde se vio el primer mosh como tal. Una canción pesadísima, inclinada al heavy metal clásico, que trajo toda la furia contenida.
Luego, "El laberinto de los secretos" sorprendió con una intro digna de una serie noventera tipo Power Rangers. La sensación era como frenar un auto de golpe en plena autopista: inesperado, veloz, vibrante. La banda jugó con los contrastes y el público respondió con fuerza.
La sorpresa teatral llegó con "Burlesque", donde una bailarina subió al escenario para interpretar una coreografía especialmente diseñada para el tema. Una puesta en escena que agregó color y teatralidad al show, sumergiendo aún más al público en el universo visual y musical de Saurom.
El show continuó con joyas como "La musa y el espíritu", "Cambia el mundo", "El círculo juglar", "Fuego", "Noche de Halloween" y, como cierre triunfal, "La taberna", que puso a todos a cantar, bailar y brindar con los brazos en alto.
Lo que Saurom logró en esta primera noche en Chile no fue solo un concierto: fue un viaje. Una experiencia total en donde la música, la teatralidad y la participación del público chileno entusiasta, fiel y explosivo fueron protagonistas por igual. Una noche juglar, mágica y profundamente emotiva que quedará en el corazón de todos los que la vivieron.
Saurom Jungle Fest (Día 2):
El Saurom Juglar Fest continuó con su segunda jornada el sábado 12 de abril, una noche repleta de sorpresas, altas dosis de energía y una fiesta sin igual en el Teatro Cariola. El público chileno, siempre cálido y entregado, fue testigo de una velada cargada de ritmos intensos, melodías sombrías y momentos épicos. La jornada, que comenzó con la poderosa banda nacional Kuervos del Sur y siguió con el debut de Abäk en Chile, cerró con la actuación estelar de Saurom, quienes brindaron un show lleno de magia y nuevas sorpresas.
El show comenzó con la potente entrada de Kuervos del Sur, quienes lograron captar de inmediato la atención del público con su sonido pesado y folclórico enérgico. La gente, que se había reunido desde temprano, ya mostraba entusiasmo y estaba dispuesta a disfrutar del espectáculo. Los primeros acordes fueron recibidos con aplausos y una gran ovación por parte de los presentes.
Con la intro de piano se construyó un ambiente sombrío, pero tan pronto como el riff comenzó a retumbar en el escenario, el público reaccionó con gritos de emoción y aplausos. La intro con wah fue uno de los momentos más recordados, donde el público, sin pensarlo, coreó la melodía a todo pulmón.
La gente respondía con fuerza, y la conexión con la banda era palpable en cada acorde. La intro del charango causó un estallido de energía en el público, quienes aplaudieron y saltaron sin parar. Kuervos del Sur supo cómo mantener el ánimo alto, con un público que se mostró muy participativo y entregado.
Tras una intro con flauta y batería, la banda demostró su habilidad para mezclar elementos folk con el metal, creando una atmósfera única que fue aplaudida por todos. Cada tema, aunque variado en su estilo, fue recibido con entusiasmo, mostrando la diversidad y el talento de la banda, que dejó el escenario con la satisfacción de haber entregado un gran show.
Tras la potente presentación de Kuervos del Sur, fue el turno de Abäk, la banda costarricense que debutaba en Chile. En reemplazo del ex guitarrista de Stratovarius Timo Tolkki. A pesar de ser su primera vez en nuestro país, la banda no tardó en conectar con el público, comenzando con su tema homónimo, "Abäk", una pieza cargada de folk metal que prendió a todos los asistentes desde el primer acorde. Los fans comenzaron a corear “¡Ole, ole, ole, Abäk!”, dejando en claro que la energía estaba a flor de piel.
El show siguió con “El Sanatorio”, un tema que dejó claro que Abäk tiene lo suyo cuando se trata de mezclar potencia y melodía. La banda aprovechó la euforia del público, que seguía participando y vitoreando en cada tema. El tema "La Mascarada" sorprendió al público, que respondió con entusiasmo y se movió al ritmo de los bongos, demostrando la versatilidad de la banda.
Un momento destacado fue cuando Abäk invitó a la artista nacional Catherina Nix para cantar “Medusa”, un tema de profunda carga emocional sobre el abuso. La ovación al final de la canción fue ensordecedora, y la conciencia social de la banda fue muy bien recibida por el público chileno.
El debut en Chile continuó con la potente “Galvarino”, una cancion que habla acerca de Galvarino, el guerrero mapuche, donde los primeros mosh pits comenzaron a aparecer, algo que se repetiría con “El tango de Lilith”, una canción que tuvo un toque melancólico y tanguero que sorprendió a los asistentes.
En un momento íntimo, Abäk pidió al público que encendiera sus linternas, creando una atmósfera mágica en el recinto, mientras la canción “Balam” llenaba el espacio. La banda cerró su set con una ovación masiva por parte de un público completamente entregado a su propuesta, dejándolos listos para lo que venía.
Abäk cerró su presentación con “Piratas del Coco”, dejando al público con una sonrisa y una ovación merecida. Su mezcla de metal melódico, energía centroamericana, contenido social y teatralidad se ganó el corazón de todos los presentes, en una noche que sin duda marcó su entrada triunfal al público chileno.
La noche cerró con la banda española Saurom, quienes, como en la jornada anterior, ofrecieron un show lleno de sorpresas y magia. Comenzaron con la mística entrada de “El principito” seguida de”El Mordisco de la Serpiente", donde una chica vestida de plateado apareció sobre el escenario, rodeada de misterio. La gaita y los riffs pesados dieron paso a una canción sombría y épica que inmediatamente cautivó a los presentes.
El público participó activamente desde el primer momento, siguiendo cada acorde y cada grito de la banda. En los momentos más bajos, como en “Baobabs”, la banda mantuvo al público en suspenso, con todos atentos a las melodías que inundaban el teatro.
Una de las sorpresas más gratas de la noche fue la aparición de Isra Ramos (exvocalista de Amadeüs) quien se unió a Saurom para interpretar "La Leyenda de Gambrinus". La química entre los artistas y la conexión con el público fueron palpables. Además, Elizabeth Amoedo (vocalista de Against Myself) también se unió a la fiesta, participando en “No Seré Yo” y brindando una interpretación vocal impresionante que hizo explotar el ánimo del público.
Otro de los momentos más esperados fue “Reina de Mis Sueños”, donde apareció la misma bailarina que realizó una bella coreografía en el escenario, un toque de elegancia que complementaba la potencia musical de Saurom. (Cabe destacar que la bailarina de Saurom es Chilena y su nombre es Valeria Guantiante). La atmósfera continuó creciendo, y cuando se conectó la electroacústica para dar paso a “La Llorona”, el público saltó al ritmo de esta pieza que se convirtió en uno de los momentos más destacados de la noche.
El show continuó con más sorpresas, incluyendo una enérgica "El Lazarillo de Tormes" junto a Isra Ramos, y el emotivo “El Pájaro Fantasma”, donde Elizabeth Amoedo hizo su aparición para aportar una gran dosis de sentimiento.
El final fue de auténtico caos controlado: "El Círculo Juglar" abrió el espacio para una especie de wall of death, aunque lo que realmente ocurrió fue un mosh pagano, donde todos danzaron y cantaron al ritmo de la melodía. "Fuego" y "Noche de Halloween" marcaron el clímax de la noche, con todos los artistas invitados subiendo al escenario para ofrecer un final inolvidable.
Con un setlist cargado de sorpresas, Saurom demostró por qué es una de las bandas más queridas de la escena. Un show de fuerza, magia, nostalgia y poder, que hizo de esta segunda jornada del Saurom Jungle Fest una noche de puro metal, y un espectáculo que quedará grabado en la memoria de todos los asistentes.
Setlist:
1)El mordisco de la serpiente (+ Vocalista Elizabeth Amoedo)
2)Baobabs
3)La leyenda de Gambrinus(+ Vocalista Isra Ramos)
4)No seré yo (+ Vocalista Elizabeth Amoedo e Isra Ramos)
5)Reina de mis sueños (+Vocalista Elizabeth Amoedo)
6)El hada & la luna (entra bailarina)
7)La Llorona
8)El lazarillo de Tormes (+ vocalista Isra Ramos)
9)Vida
10)Todo en mi vida
11)El pájaro fantasma (+ vocalista Elizabeth Amoedo)
12)El carnaval del diablo
13)El círculo juglar
14)Fuego
15)Noche de Halloween (todos los artistas invitados)
16)La taberna (todos los artistas invitados)
Por Vicente Stuardo
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