En el marco de su próximo debut en Chile, conversamos con Martin Schirenc el mítico lider de Pungent Stentch. Quien repasó una serie de temas relacionados con su carrera, la situación actual de la música extrema y, por supuesto, la emoción de encontrarse con su fans chilenos después de 35 años esperando el debut de una de las bandas más brutales que existen. Los dejamos con esta conversación.
Resistance: Hola Martin! Muchas gracias por conversar con nosotros, es un honor. Primero que todo, hablemos de esta visita a Chile. Les tomó más de 35 años venir. ¿Por qué se demoraron tanto y qué esperan del público chileno? Somos conocidos por ser de los fans más apasionados del metal extremo.
Martin Schirenc: ¿Por qué tomó tanto? No lo sé, deben ser varias razones. En su momento no había tantos festivales, había que hacer giras de clubes, y eso siempre es un tema de dinero y logística. En Latinoamérica tienes que volar prácticamente todos los días, se vuelve caro y tedioso. Con el tiempo lo logramos: en los 90 no tocamos en Latinoamérica, pero cuando vinimos por primera vez hicimos México, Colombia y Brasil; y aún quedan muchos países por tocar. Ahora que vamos a Chile, espero que se abra más. Sobre el público: que sea entusiasta y alborotado es lo esperable en Latinoamérica. En México tuvimos shows "asustadoramente" locos… nos tiraron hasta tapas de inodoro al escenario. Así que vengo preparado para el carnage total.
R: El proyecto ahora se llama Schirenc Plays Pungent Stench y no simplemente "Pungent Stench". ¿Por qué ese nombre? ¿Hubo un motivo práctico o conceptual?
MS: Fue por una demanda, para ser sincero. Todos los ex miembros de Pungent Stench tienen derechos sobre el nombre. Yo iba a usar "The Church of Pungent Stench", pero a otros miembros no les gustó y tuvimos que llegar a un acuerdo legal: tenía que quedar claro que no es la banda original. Por eso lo hice explícito: "Schirenc toca Pungent Stench". El nombre es tosco, sí, pero la gente capta "Pungent Stench", que es lo que importa. Estas cosas legales son tediosas y muchas bandas pasan por lo mismo. Ya son 12 o 13 años con este nombre; en Europa la gente lo entiende y lo acepta. En América quizá no es tan conocido, pero así quedó.
R: Pasa harto. Hay muchos casos: lo de Celtic Frost, E-Force tocando material clásico de Voivod, Cro-Mags con distintas formaciones, etc.
MS: Totalmente. Hace unos años tocamos en un festival en Estados Unidos y miré el cartel pensando "¡puras bandas con demandas!". Hoy mismo toca Harley Flanagan tarde; voy a ir a verlo. He visto videos suyos tocando Cro-Mags: buenísimo. Ese primer álbum fue un despertador para muchos.
R: Sobre el estilo: a Pungent Stench la catalogan como death metal, pero no en una forma "pura". Hay influencias de gore-grind (Repulsion, Terrorizer), y yo, que soy fan del hardcore, escucho Agnostic Front y la escuela NYHC. Ustedes son de Viena, ¿cómo se dio esa mezcla?
MS: Crecimos con metal y con punk; somos fans de punk y naturalmente también de hardcore. Agnostic Front fue una gran influencia; Sheer Terror también. Y cosas inglesas: Discharge, GBH, The Exploited. Nos gusta la actitud punk: tocar con actitud más que con virtuosismo. Entre nosotros: no somos grandes músicos ni quisimos ser una banda técnica. Cuando aparecieron el death y el grind a mediados de los 80, después de que todo se volviera ultra técnico, escuché Repulsion y pensé: "esto es, un gran dedo del medio". Subir, enchufar y tocar. Mucha actitud punk con sonido metal. Hasta hoy me gustan el punk, el heavy ochentero, el rock de los 60/70. Me encanta el prog setentero británico, pero sé que no soy ese tipo de músico ni tengo la paciencia para serlo. Nosotros servimos a la tribu punk-rock, por así decirlo.
R: En su momento firmaron con Nuclear Blast. Aun estando en un sello gigante, mantuvieron la línea. ¿Sintieron presión para cambiar y ser más "masivos"?
MS: Nuclear Blast intentó intervenir, pero no tanto en lo musical. Querían, por ejemplo, que no imprimiéramos las letras en el arte, o mandarnos a estudios "más de moda" para una gran producción. Con las portadas siempre hubo tiras y aflojas: les mandábamos ideas y respondían "¿están seguros? ¿no prefieren un cementerio bonito?". Y nosotros: "no, eso no somos". Al final, ellos también evitaban problemas porque Alemania siempre tuvo una línea autoritaria con la censura: películas cortadas, discos vetados. Si censuran, no puedes vender. Dos de nuestros álbumes fueron prohibidos en Alemania años después de salir. Si eres un sello alemán, lo tienes que considerar.
R: Justo de eso quería hablar: la "firma" de Pungent Stench son las portadas, las letras y esa mezcla de gore, necrofilia y humor negro, lejos del satanismo más típico. Pero hoy el clima social es muy sensible, acá y en Europa. ¿Cómo crees que se recibirá su música?
MS: Estoy totalmente en contra de la censura. Soy defensor de la libertad de expresión; es la base de una sociedad no autoritaria. En los últimos diez años la "corrección" o wokeness lo gobierna todo: no solo la música, también el humor y cada aspecto. Y esto no es un movimiento espontáneo; lo empujan gobiernos y medios. Hemos tenido shows cancelados por eso. En los 90 nos banearon un disco en Australia y aun así podíamos tocar; ahora hay salas "punk" que te dicen "no pueden tocar, son misóginos", etc. No pienso retroceder ni predicar para la tribu. Es una minoría muy ruidosa; la mayoría no compra eso, solo tiene miedo de que los llamen nazi, fascista o racista. Creo que se viene un cambio: la gente está cansada de que la insulten. Llamar "nazi" a alguien no es como decirle "idiota". No vamos a poner banderitas en la bio para quedar bien y asegurar fechas. Si cancelan un show, habrá otro; si les dejas cancelar todos, irán por más. Nunca es suficiente para ellos. Yo ya estoy grande, no me preocupa que me "cancelen". Si no toco en tu club, tocaré en otro.
R: Cambiando de tema: te he visto usar Fender Telecaster. No es lo típico en metal extremo. ¿Es una declaración o parte del sonido?
MS: He tocado de todo, pero cuando pasé a Telecasters me gustó su sobriedad: un pedazo de madera, un mástil atornillado y listo. Si se te cae, no pasa nada; una Gibson se me cayó una vez y se quebró el mástil. Son herramientas estables. Tienen un sonido distintivo: yo les pongo humbucker, pero mantienen esa percusión que me encanta. No son "gordas", son agresivas; lo "gordo" lo pone el bajo, al que le damos tanto protagonismo como a las guitarras, al estilo Motörhead: es casi otra guitarra una octava abajo y distorsionada. Además es divertido llegar a un festival lleno de guitarras puntiagudas, sacar una Tele y que todos digan "¿qué es eso?"… y suene tremendo. Parece "poco metal", pero puedes tocar lo que sea con ella.
R: Volviendo al nombre Schirenc Plays Pungent Stench: ¿es solo para tocar material clásico? Me imagino sobre todo los tres primeros discos.
MS: El show actual está centrado en un álbum que tocamos completo. También hacemos un par del segundo disco y algunas más según el tiempo de set.
R: ¿Y la posibilidad de grabar música nueva?
MS: Sí. Hace dos años volvió nuestro bajista original y tenemos baterista nuevo, un chico joven de Persia que entiende lo que hacemos. Tengo riffs acumulados y planeamos sacar material nuevo. No hay fechas aún, pero está en marcha.
R: Para cerrar (me están apurando): ¿qué mensaje le das a quienes mantuvieron viva la llama de Pungent Stench y por fin los verán en Chile?
MS: Gracias por mantener la llama encendida y empujarnos a continuar. Estamos muy entusiasmados con ir por primera vez a Chile; hemos escuchado mucho del público y estamos felices de ser parte del festival. Nos vemos pronto.
R: Nosotros también estamos muy emocionados. ¡Gracias por tu tiempo, Martin! Nos vemos en diciembre.
MS: ¡Nos vemos! Gracias por la entrevista y por el apoyo.
Recuerda que Martin Schirenc presentará un repertorio de Pungent Stench el próximo 6 y 7 de diciembre en el Teatro Caupolicán en un show imperdible en el marco del Chile Terror Fest. Venta de entradas a través de Puntoticket.